Luis Muñoz, Juanpi e Hicham protagonizaron una contra letal que supuso el gol y la victoria final
Los jugadores se abrazan al finalizar el encuentro | Foto: www.malagacf.com
Málaga CF
Hicham (min.61)
1 – 0
RC Deportivo
Alineaciones:
Málaga CF: Munir, Cifu, Juande, Lombán, Ismael Casas, Juankar, Benkhemassa (Rolón, m. 53), Adrián (Luis Muñoz, m. 53), T. Morente (Hicham, m. 53), Juanpi (Renato, m. 85) y Sadiku.
RC Deportivo: Dani Giménez, Eneko Bóveda (S. Merino, m. 69), Mujaid, Álex Bergantiños, Montero, David Simón (C. Santos, m. 69), Gaku (Borja Valle, m. 46), Vicente Gómez, Aketxe, Emre Çolak (Mollejo, m. 58) y Beauvue (Hugo Vallejo, m. 58).
Árbitro:
José Antonio López Toca (Comité Cántabro). Amonestó a Gaku (min. 23), Benkhemassa (min. 38), Mollejo (min. 63), Christian Santos (min. 71); Mujaid (min. 72).
Incidencia:
Partido correspondiente a la 39ª jornada de la Liga Smartbank disputado en el Estadio La Rosaleda a puerta cerrada debido al protocolo Covid-19.
Se trataba de una final, un partido en el que no se podía fallar por parte del equipo malaguista y es que apenas contaba con un colchón de dos puntos respecto a la zona de descenso. Las lesiones de algunos jugadores con ficha profesional preocupaban al cuerpo técnico y es que, para completar la lista de convocatorias de cada partido, se tiene que contar con jugadores de la cantera, de La Academia. Tras un saque de esquina del equipo visitante, el tridente de jugadores de la cantera (Luis Muñoz, Juanpi e Hicham) «la liaron» ejecutando, tras el robo del esférico, una contra de forma sensacional. La asistencia de Juanpi es mágica y la «forma corporal» en que ejecuta el disparo Hicham es «de dejar clavado a todos», incluido a Dani Giménez que se ni se esforzó en detener el disparo. El grito de rabia y liberación por parte de Luis Muñoz celebrando el gol es la representación de todo el malaguismo, el sentimiento de los sufridores. Al finalizar el partido, ocurrió justo lo que pedía Pellicer: la unión de todos. Los abrazos y emociones de forma continua sobre el terreno de juego eran evidente. Queda un pequeño pasito para conseguir la salvación y, por ello, el equipo debe afrontar con la profesionalidad y exigencia que requiere sus próximos enfrentamientos (ante Sporting de Gijón, Alcorcón y Almería) para certificar la salvación. Para aquellos que son amantes de las estadísticas, el equipo de Pellicer acumula cinco partidos consecutivos con la portería imbatida y es el séptimo encuentro que acumular sin perder.
Disposición táctica novedosa
El técnico malaguista sorprendió a todos con el once inicial presentado, y es que con la presencia de Ismael, Cifu, Juankar y Adrian se pudo hacer quinielas sobre si la disposición táctica era 4-4-2, 5-4-1 o 4-1-4-1 …. Finalmente el tridente de centrales estaría formado por Ismael-Lombán-Juande y quedando en punta Sadiku.
En la primera parte del encuentro fue clave la actitud con el que salió desde el primer minuto el equipo malaguista: era primordial salir a por el rival y para ello se ejerció una presión alta y constante sobre los jugadores visitantes. El Deportivo, viendo lo acontecido, decidió replegarse para tapar huecos. Las ocasiones de los malaguistas vinieron de las botas de Juanpi a través de una falta, Adrián tras no aprovechar un rechace en el interior del área del meta visitante y de Tete Morente tras disparo en el área con varios jugadores delante de Dani Giménez. Por parte del equipo gallego, una volea de Gaku y un remate de Çolak. Tras finalizar los primeros cuarenta y cinco minutos, se mantenía el 0-0.
La Academia en acción
La segunda parte comenzó con algo que no le gustó a Pellicer y decidió actuar de inmediato: un triple cambio que efectuó en el minuto cincuenta y tres donde se marcharon Adrián, Benkhemassa y Tete Morente (por Rolón, Luis Muñoz e Hicham) que sería decisivo. Apenas ocho minutos hicieron falta para construir la jugada del gol: un balón dividido en zona defensiva malaguista, recuperación, contra y gol con protagonista de cantera (Luis Muñoz, Juanpi e Hicham). Era el premio, lo justo tras lo visto hasta esos minutos, de un equipo que había buscado la meta visitante con convicción.
Tras el gol, y hasta el final del partido, el Deportivo fue a buscar el empate de forma tímida: la sensación de peligro estuvo bajo mínimos, salvo algunos centros al área que Munir logro detener.
Tras la victoria cosechada, al Deportivo es a otro rival de la zona baja al que se le tiene ganado el golaverage, que tan fundamental podría ser a final de temporada.
Hoy Pellicer sí fue providencial con sus actuaciones. Al igual que se le criticó en algunas jornadas por su inoperancia o falta de contundencia en momento claves del encuentro, hoy con los jugadores que han sido de la partida y el triple cambio efectuando sentando a Tete Morente (su calidad es indiscutible) sin temblarle el pulso, le hacen ser uno de los causantes principales de haberse logrado la victoria.
Los jugadores descansarán mañana antes de afrontar la preparación del partido a disputar el próximo lunes en El Molinón ante el Sporting de Gijón. Bendito descanso tras la victoria… que dirían algunos!!!
