La crónica: «Mismo VAR, insuficiente punto»

El año 2021 ha llegado… pero no hay cambios, algunas cosas siguen igual. El equipo blanquiazul consiguió un punto que sabe a poco dado que se enfrentó al colista de la categoría. Se crearon ocasiones, pero la falta de efectividad en zona ofensiva sigue patente y, cuando se consiguió lograr adelantar en el marcador, la alegría apena duró tres minutos que fue lo que tardó el árbitro en pitar la pena máxima en contra de los blanquiazules y lograr el gol los locales. Sin embargo, minutos después en área manchega un claro agarrón a Joaquín no fue suficiente ni para el árbitro ni para el VAR para pitar penalti. Que difícil es todo para el Málaga CF…

Pellicer dispuso de un once inicial con un dibujo táctico, 4-5-1, 4-2-3-1,… donde en las bandas estuvieron Joaquín y Jairo, en doble pivote el habitual Ramón-Luis y como referencia en punta Quintana. Aunque viajó, finalmente Yanis no pudo participar en el partido por no levantarse la sanción.

Equilibrio

En la primera parte, ambos equipos mostraron en los primeros veinte minutos un cierto equilibrio sobre el terreno de juego. Se vio a un Málaga donde en parte ofensiva se le notaba falto; Caye mostraba compromiso, luchaba y corría pero apenas lograba generar claras ocasiones. El jugador le faltó su compañero Chavarría con el que muestra verdadero peligro en ataque.

El equipo manchego se limitaba a esperar al rival y aprovechar sus errores: en el minuto 26 el jugador visitante Lombán regaló el esférico en la salida en zona defensiva y Ortuño logró marcar aunque la jugada quedó invalidada por fuera de juego. Los últimos quince minutos se vio a un Albacete crecido frente a un Málaga errático, dejando el dominio del juego a los locales que en los minutos finales tuvieron un par de ocasiones para lograr adelantarse en el marcador pero Dani Barrio evitó males mayores. 

Tres minutos claves

Las instrucciones de Pellicer debían ser claras, el equipo había perdido el posicionamiento en el último tramo de la primera parte. En el minuto 50 Jairo fue “el más listo de la clase» aprovechándose de un error garrafal de la defensa manchega, donde Fuster hizo un pase horizontal en defensa sobre la zona central y quedó solo ante Tomeu para hacer el 0-1 en el marcador. Se había hecho lo más difícil y quedaba muy presionado el equipo local al verse obligado a buscar el gol.

Solo hizo falta llegar a la acción siguiente para que el local Ortuño, tras un quiebro a Escassi, fuese derribado y el árbitro pitase un dudoso penalti a favor de los locales. El mismo delantero lanzó la pena máxima por el centro de la portería y Dani Barrio estuvo a punto de desviar el esférico con el pie. A partir de aquí, lejos de verse afectado, el equipo malaguista fue a por el partido en un desgaste en la presión, posicionamiento y recuperación en área rival. Las ocasiones se sucedieron sobre todo con la salida al terreno de juego de Orlando Sá: cabezazo forzado de Quintana, otro de Orlando Sá que despejó Tomé, Joaquín creando peligro de forma continuada, ocasión final de Juande con despeje del rival (éste último en fuera de juego). En medio de todo esto llegó la jugada polémica en área local con un regate «de ruleta» de Joaquín al defensa rival y que este frenó en forma tanto de patada como de agarrón. Ni lo vio el árbitro ni fue avisado por el VAR para analizar esta jugada y el posible contacto, que hubiese sido crucial para tener clara opción desde los once metros de volver a adelantarse los blanquiazules en el marcador.

El Málaga suma en su casillero 27 puntos, manteniéndose en la zona media de la clasificación alejado en ocho puntos de la zona de descenso, estando a una jornada de finalizar la primera vuelva de la competición liguera. Ahora afronta un doble enfrentamiento esta semana ante el Real Oviedo (Copa del Rey y Liga) en La Rosaleda para recuperar la sonrisa en forma de victoria.