El equipo de Suso Gallardo, victima de su irregularidad, cae ante un rival que no había puntuado en esta 2ªfase
Foto: @CBLaCalzada
Liberbank Gijón
24 – 23
Rincón Fertilidad Málaga
Alineaciones:
LIBERBANK GIJÓN: Ezbida (P), Palicio (5), Martínez (1), Vallina (1), González (5), Palomo (3), Montilla (2) – siete inicial – Álvarez (P), Calbon (0), Faria (1), Torreira (0), Collado (0), Fernández (0), Méndez (6) y Alonso (0).
RINCÓN FERTILIDAD MÁLAGA: Fernández (P), Sole López (5), Espe López (4), Doiro (1), García (1), Medeiros (4), Campigli (2) – siete inicial – Castellanos (P), Rojas (3), Gutiérrez (0), Sánchez (0), Arderius (2), Pérez (0) y Bravo (1).
PARCIALES CADA 5 MINUTOS: 2-4, 3-7, 6-7, 8-9, 10-12, 12-12 (descanso); 15-13, 15-18, 17-19, 19-20, 22-22, 24-23 (final).
Árbitro:
Sergio Rodríguez y Andrés Rosendo, del colegio gallego. Excluyeron por parte del equipo local a Méndez, Faria y Torreira, Palomo y por parte del conjunto malagueño a Sánchez y García.
Incidencia:
Encuentro perteneciente a la 7ª jornada del Grupo por el Título de la Liga Guerreras Iberdrola 2020/2021 celebrado en el Pabellón de la Arena de Gijón.
No pudo ser, incluso sabiéndose que el Rocasa había encajado una derrota ante el Bera Bera y que en el caso de victoria podía volver a creer en alcanzar la tercera posición. El equipo de Suso Gallardo encajó la segunda derrota consecutiva en liga ante un equipo que aún no había logrado puntuar en esta fase. Se mostró de forma intermitente, sin continuidad, irregular, capaz de lo mejor y de lo peor. Al igual que el anterior partido, la falta de ideas en ataques y las continuas pérdidas y errores lastraron a las malagueñas.
Empezaron el encuentro bien las visitantes, destacando la capitana Sole López y bajo portería Virginia que se mostraban muy activas, lográndose la primera ventaja importante en el marcador (3-7). No obstante, la irregularidad hacía presencia y junto a la falta de ideas hacía que se llegase al descanso con empate en el marcador (12-12). Se producían simultáneamente bajones y mejorías pero esto no le servía para poder tomar ventaja ante las gijonesas.
Al contrario que en la primera parte, al inicio de la segunda las locales salieron convencidas de ir a por el encuentro y mandando en el marcador por dos goles de diferencia (15-13). Pero las panteras reaccionaron logrando un parcial de 0-5 gracias a la actuación en portería y a diversos robos en defensa que le sirvieron para contragolpear y lograr una renta de dos goles.
Faltó la puntilla, saber distanciarse en el marcador y, debido a ello, las locales lograron la igualada y se llegaba así a los últimos cinco minutos. Aquellas que estuviesen más finos se llevaría el gato al agua, y las visitantes fueron condenadas a la derrota: errores propios en defensa y no convertir dos claros lanzamientos en ataque hicieron que las locales lograsen los primeros puntos en forma de victoria (24-23).
Finalmente, el equipo luchará en las jornadas restantes por la cuarta plaza de la clasificación, que hasta ahora ha sido su mejor puesto histórico.