El equipo malaguista, en la mejor primera parte de la temporada y gracias a los goles de Chavarría y Quintana, asalta La Romareda en forma de victoria
Foto: www.malagacf.com / www.laliga.com
R. Zaragoza
Adrián (min.83)
1 – 2
Málaga CF
Chavarría (min.14)
Quintana (min.26)
Alineaciones:
R.Zaragoza: Álvarez, Tejero, Pichu, Guitián, Nieto, (Chavarría, min.81), Ros (Papunashvili, min.65), Eguaras, Larrazabal (Vuckkic, min.46), Zanimacchia (Bermejo, min.46), Narváez y Fernández (Adrián, min.65).
Málaga CF: Soriano, Calero, Mejías, Juande, Matos, Ramón (Jairo, min.77), L.Muñoz (Lombán, min.91), Yanis, (Benkhemassa, min.77), Quintana (Jozabed, min.92) y Chavarría (Cristian, min.67).
Árbitro:
Ortiz Arias (Colegiado madrileño). Mostró tarjeta amarilla a Juande (min.33), Chavarría (min.62) y Tejero (min.94).
Incidencia:
Partido correspondiente a la 6ª jornada de La Liga Smartbank disputado en el Estadio La Romareda a puerta cerrada por protocolo Covid19.
Goles son amores… y si son con delanteros mejor. Al fin hubo fumata blanca respecto a los que deben ser los goleadores del equipo. Se empezaba a dudar de la capacidad ofensiva del equipo, saber si existía falta de pólvora en sus jugadores o si la creación de peligro estaba mal gestionada. Pero justo en este momento se reivindicaron Quintana y Chavarría… se repartieron los regalos y los delanteros malaguistas estrenaron sus casilleros.
Se recuperan sensaciones: la presión en zona alta para incomodar al rival, la solidez defensiva aún encajando un gol…, saber sufrir cuando el marcador se ajustó en el tramo final del partido… y la solidaridad del equipo hacía un fin común que no fue otra que amarrar la victoria.
Gran primera parte
Pellicer debía ofrecer una alternativa que mostrara mayor presencia ofensiva en el terreno de juego. Dos goles en cinco partidos, ausencia de goles en los dos último partidos, falta de pegada… y se apostó en el día de hoy con un once titular donde aparecía una defensa con tres centrales (Mejías, Escassi y Juande), un doble pivote formado por Luís Muñoz y Ramón, las bandas para Yanis y Quintana y en punta Chavarría. Con ello, el míster buscaba detener la peligrosidad ofensiva del rival, mayor contención en el medio centro y contar como referencia con Chavarría para buscar el gol.
Mientras que, la semana anterior, Pepe Mel se impuso a Pellicer esta vez el castellonense le ganó la partida a Rubén Baraja… en todas las líneas.
El partido comenzó, y era dominador del esférico los locales logrando mayor posesión. Sin embargo, el equipo visitante hacía el trabajo efectivo: presión en zona alta a sus rivales y crear, ahora sí, peligro. Llegó el minuto 14 y se trenzó una buena jugada por parte de los malaguistas con pase en largo de Luis Muñoz a Yanis que controla con el pecho y, tras centro medido, cabeceó Chavarría en picado imposible para Álvarez. Auténtico remate de delantero, que logró el 0-1 a pesar de esperar eternamente su validez por el VAR.
Llegaría, poco después, en el minuto 26 un nuevo gol para los visitantes tras jugada iniciada por Ramón y combinación excepcional de Chavarría que le puso una asistencia mágica a Quintana para que rematase y pusiera el 0-2. No se sabe si fue mejor el pase, el desmarque… pero ambos se retroalimentaron con esta acción. De aquí a finalizar la primera parte sólo se concedió una oportunidad para los locales en el minuto 44 con un disparo a bocajarro de Zanimacchia y excepcional parada de Juan Soriano con el pie «a lo futbol sala» que evitó encajar un gol psicológico. Se llegaba al final de la primera parte con el 0-2 a favor de los visitantes, resultado sorpresa teóricamente antes del inicio pero justo por lo visto hasta ese momento en el terreno de juego.
Reacción local, sufrimiento atrás
El equipo de Rubén Baraja tenía que reaccionar tras la nefasta primera parte que realizaron. Aunque en el minuto 51 los visitantes pudieron hacer el 0-3 tras el disparo de Chavarría en el lateral de la red, el ímpetu de los locales por acortar el marcador hizo que los malaguista defendieran en su propia área cualquier conato de peligro durante todo este periodo. A los locales le faltó puntería, una bendición para los malacitanos: falló de Atienza en boca de gol, balón parado desaprovechado de Toro, tiro de Narváez rozando la escuadra, Papu,… merecía el gol los zaragocistas en ese intervalo de tiempo.
Tuvo que ser, como no, el ex malaguista Adrián quien lograra perforar la meta de Soriano tras recibir libre de marca un pase desde banda derecha (1-2). Quedaba sufrir en los últimos minutos del partido, había que amarrar la victoria y la supo obtener. Es cierto que en todo este periodo el equipo jugó a verlas venir, demasiado atrás defendiendo, pero aguantó.
¡Bendita victoria! El equipo logra diez puntos de dieciocho jugados: ¿Quién iba a imaginar este arranque liguero tras todo lo sufrido el club a nivel institucional y deportivo?