El equipo de Pellicer, con «problemas» cada jornada para sacar un once inicial,  es el que menos goles encaja en la categoría 

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Foto: www.malagacf.com

El Málaga CF parece que, ahora sí, empieza a recuperar las sensaciones que tenían antes del parón liguero. Se había generado muchas dudas para afrontar la final de la temporada. Tras la jornada 37, el equipo ocupa la 15ª posición y se encuentra con una distancia de cuatro puntos respecto a la zona de descenso.

Muchos temían que, tras un mal inicio en la vuelta de los partidos ligueros en el mes de junio y al no obtener los puntos esperados, los partidos que tenía que afrontar ante equipos de la zona alta como el Girona y el Rayo Vallecano iban a suponer derrotas y, con ello, caer en zona de descenso. Nada más lejos de la realidad: Pellicer parece ser que ha encontrado la formación táctica más efectiva con estos jugadores, un 5-4-1 en línea con tres centrales en la defensa y dos carrileros (Cifu y Juankar) que implica que se alcance una solidez defensiva y poder generar ocasiones de gol.

El equipo acumula el tercer partido consecutivo sin encajar gol alguno, y siempre decimos que «una casa debe construirse por los pilares»… en términos futbolísticos una sólida defensa implica puntuar en los partidos. Actualmente, el equipo es el que menos goles en contra recibe (treinta y un goles) aunque bien es cierto que es el segundo peor equipo en registro de goles a favor (únicamente está por detrás el Albacete Balompié con treinta goles). Munir es el actual Zamora de la Liga Smartbank.

Pellicer ha dirigido al equipo en quince encuentros, donde ha cosechado cinco victorias, siete empates y tres derrotas (22 puntos de 45 puntos posibles) lo que supone un 48,89 % de los puntos. En el caso de Víctor Sánchez (su antecesor) dirigió veintidós encuentros donde logró cuatro victorias, once empates y siete derrotas (23 puntos de 66 puntos posibles) que se trata del 34,85 % de los puntos. Pellicer está a un punto de conseguir los mismo puntos que Victor Sánchez con un rango de siete partidos por disputar. En esta segunda vuelta, los puntos obtenidos por Pellicer serían semejantes a un equipo que rozaría puestos de playoff de ascenso a la máxima categoría, al menos en la actual temporada.

La derrota más severa que encajó el equipo con Pellicer fue en La Rosaleda ante el Huesca por 1-3 mientras que las victorias más amplias ha sido ante el Racing y Girona por 2-0, ambas en La Rosaleda. 

Pellicer parece que ahora ha logrado tener activado a todos sus jugadores, jueguen o no. Cuenta con el gran inconveniente de que tiene una plantilla descompensada en su confección, donde existe una clara escasez de fichas profesionales y donde la alineación indebida ha estado en el entorno del cuerpo técnico. Cada partido, además, cuenta con el «agravante» de tener que contar con varios jugadores de la cantera para confeccionar la lista de convocados al existir varios jugadores profesionales en la enfermería y que no terminan de recuperarse. No obstante, el equipo muestra su compromiso, sus valores… como quedó plasmado en el Estadio de Vallecas.

Ahora le queda lo más difícil, certificar la salvación. Existe una gran competitividad en la categoría y seguro que los rivales no se lo pondrán fácil pero, en estos momentos, el equipo blanquiazul depende de sí mismo para lograr la salvación.