Al Málaga CF le basta con una dosis de calidad y una extraordinaria solidez defensiva para lograr una nueva victoria ante los madrileños, que estaban invictos
Foto: www.malagacf.com
Málaga CF
Cristian (min.43)
1 – 0
AD Alcorcón
Alineaciones:
Málaga CF: Barrios, Calero, Juande, Escassi, Martos, Ramón, Benkhemassa, Cristian Rodríguez, Yanis, Quintana y Orlando Sá.
AD Alcorcón: Jiménez, Laure, David Fernández, Castro, José Carlos, Gorostidi, Boateng, Fraile, Bellvís, Arribas, Gual.
Árbitro:
Pulido Santana. Mostró tarjeta amarilla a Boateng (min.50 y 85, expulsión), y a Ramón (min.66).
Incidencia:
Partido correspondiente a la 3ª jornada de la Liga Smartbank disputado en el Estadio de La Rosaleda a puerta cerrada por protocolo Covid19.
Si hace poco más de tres semanas le dicen a cualquier personal interno del club, socios, aficionados, periodistas y aficionados en general del mundo del fútbol que tras finalizar la tercera jornada liguera el Málaga iba a tener «en su mochila» seis de los nueve puntos disputados, nadie lo creería. Se despiertan nuevas ilusiones del malaguismo ante lo inesperado.
El Málaga CF, de la mano de Pellicer, sigue con su particular pretemporada y con una plantilla que de aquí a la finalización del mercado de fichajes variará en un número importante de jugadores debido a la negociación del ERE que se está llevando a cabo con la implicación de salidas y llegadas de nuevos jugadores. Aún así, la dosis de derroche, complicidad, unión, compromiso y fe sobre el terreno de juego por parte de cada uno de los jugadores es innegable y con esto… el orgullo es máximo para el aficionado, gane o se pierda.
El equipo malacitano muestra una eficacia total, con apenas ocasiones logra perforar la meta contraria y empieza a dar síntomas de equipo rocoso con una importante solidez defensiva. Segundo partido consecutivo que no encaja gol. Si a un equipo que muestra estas credenciales le permites que se sitúe por delante en el marcador, al equipo rival se le puede hacer un mundo lograr igualar la contienda como les ha pasado al CD Castellón y a la AD Alcorcón. Este encuentro fue muestra de ello: golazo para la galería de Cristian Rodríguez tras centro de Matos y, en toda la segunda parte, una falta lanzada y detenida sin complicaciones por el meta local fue todo el peligro generado por los visitantes. Pellicer, además, muestra como entrenador talentoso una galería de disposiciones tácticas usando la tercera variación en el tercer partido y los jugadores, como colosos, muestran una gran adaptabilidad al mismo. Pasito a pasito.
Cristian logró desequilibrar la balanza
El entrenador local fue a por el partido, desde el túnel de vestuarios. Cada equipo siempre sale con el discurso de que va a por los tres puntos, pero en este partido la apuesta fue clara y esa vez la referencia ofensiva fue Orlando Sá y Quintana, con un sistema táctico 4-4-2. La novedad empezó en la previa del partido, y es que Pellicer decidió dar la charla a sus jugadores en el propio césped de La Rosaleda ante la mirada atónita de los presentes.
El partido, en su comienzo, transcurría sin peligro en las áreas en los primeros minutos pero la sensación es que se le veía al club blanquiazul incómodo, superado por la mayor presencia en el centro del campo por parte de los madrileños y apenas lograban los locales crear peligro en zona ofensiva. En posicionamiento se veía mejor a los madrileños. No obstante, en el minuto 31 Quintana, tras efectuar un recorte en la frontal del área, disparó fuerte pero el visitante Castro logró detener el peligro y, minutos más tarde, Orlando Sá cabeceó una falta botada por Yanis pero el meta visitante tras espectacular estirada logró desviar el esférico aunque posteriormente el árbitro invalidó la jugada por fuera de juego. Se empezaba a ver en este segundo tramo de la primera mitad mayor presencia de los locales.
Llegó el minuto 43, y el esférico llega en zona ofensiva por banda izquierda a Matos que centra al centro del área y llega el esférico a Cristian, libre de marca, que directamente de volea, en posición casi inverosímil, remata pegado al palo derecho de la meta defendida por Dani Jiménez que le pilla desprevenido y no puede evitar el primera gol de los malaguistas. Nuevamente la calidad individual hacía de carácter diferenciador, golazo. Poco después, el árbitro decretaría el final de la primera mitad con ventaja momentánea de los locales.
Solidez defensiva, ausencia de peligro
La segunda mitad se resume en un control posicional total por parte del equipo local al verse por delante en el marcador, ofreciendo gran solidez defensiva. El equipo visitante, en el minuto 55, sufrió la lesión de Bellvís. La única ocasión clara a reseñar de los madrileños fue una falta, en el minuto 72, lanzada por Sosa pero el balón fue centrado a las manos de Dani Barrios.
En el minuto 85 fue expulsado por doble tarjeta amarilla, de forma justa, el visitante Boateng tras agarrar a Cristian para evitar una contra. El Málaga CF no sufrió en el área ningún peligro en los últimos minutos, y pudo amarrar la victoria sin problemas.
Durante la próxima semana surgirán novedades a nivel extradeportivo, pero el equipo blanquiazul sigue respondiendo sobre el terreno de juego con la segunda victoria consecutiva. Que le quiten «lo bailao» a los jugadores y, por supuesto, a Pellicer… patrón del barco.